martes, 28 de octubre de 2025

Tema 3. La Edad Moderna.

 

Tema 3. La Edad Moderna.

3.1) Los Reyes Católicos: unión dinástica e instituciones de gobierno. La guerra de Granada.

Enrique IV, tras la firma del Pacto de los Toros de Guisando en 1468, reconoce a Isabel como heredera de la Corona de Castilla. Pero el matrimonio de Isabel con Fernando de Aragón (1469) anuló el pacto y Enrique IV nombró a Juana la Beltraneja como su heredera. Se inició una guerra civil entre los partidarios de Isabel y los partidarios de Juana la Beltraneja. La guerra finalizó en 1479 con la victoria de Isabel.

El reinado de los Reyes Católicos ha sido presentado como el punto de partida de la unidad nacional de España. Esta idea debe rechazarse por las siguientes razones:

1.   Es sólo una unión dinástica producida por el matrimonio de los titulares de Castilla (Isabel I) y de la Corona de Aragón (Fernando II).

2.   La unión dinástica no supuso la creación de un Estado unificado y centralizado, sino que cada reino mantuvo sus propias características: instituciones políticas, aduanas, moneda, sistema jurídico, etc.

3.   Castilla es el principal elemento de esta unión por razones económicas, demográficas y por su mayor extensión territorial. La monarquía de los Reyes Católicos se basó en la primacía de Castilla.

   Los Reyes Católicos realizaron una reforma política con la finalidad de reforzar el poder real. Esta reforma encajaba con la tradición monárquica castellana (monarquía autoritaria) frente a la tradición de la monarquía aragonesa (pactista). El reforzamiento del poder real se hizo a costa de la nobleza. Ésta perdió poder político pero salió reforzada económica y socialmente. Las principales reformas fueron:

§  La creación de la Santa Hermandad (1476), organismo dependiente de los concejos castellanos que tenía funciones judiciales y policiales. Su objetivo era restablecer tras la guerra civil castellana.

§  Reorganización del Consejo Real (Consejo de Castilla). Se reforzó su tendencia a la profesionalización. Fue el principal órgano de gobierno.

§  Fortalecimiento de la Contaduría o Hacienda Real mediante la recuperación de rentas que la Corona había perdido a favor de los nobles a lo largo de los siglos XIV y XV.

§  Potenciación de la figura del corregidor. Se convierte en la principal autoridad en los ayuntamientos. Supuso el fin de la autonomía municipal.

§  Patronato regio. Los Reyes Católicos consiguieron el privilegio de nombrar a los altos cargos eclesiásticos en los nuevos territorios de Granada, Indias y Canarias.

§  La creación del Tribunal de la Inquisición. Era un tribunal dirigido por la Corona, a través del Consejo de la Inquisición y de la designación del Inquisidor General. El objetivo era identificar la comunidad política sobre la que se gobierna con una religión, el que profesa una religión diferente es considerado como un posible opositor político.

§  Ejército dependiente de la Corona.

§  Embajadores que representan a la Monarquía Hispánica.

 

   La guerra de Granada. Las fronteras entre Castilla y el Reino de Granada se habían fijado en el siglo XIII. Era un reino tributario de Castilla, es decir, satisfacía parias a cambio del mantenimiento de la paz. La toma de Zahara por lo granadinos en 1481 fue el detonante del conflicto  que se prolongó hasta el año 1492. El 2 de enero de 1492, el último rey granadino, Boabdil, rindió la ciudad a las tropas castellanas. Las condiciones de la rendición se recogen en la Capitulación de Granada. En ella, se reconocía a los musulmanes granadinos el respeto a su religión y a sus leyes. El reino fue incorporado Castilla y se concedió el derecho a la ciudad de Granada de enviar procuradores a las Cortes castellanas. La conquista de Granada permitió la expansión castellana en el norte de África.

 

3.2) Exploración, conquista y colonización de América (desde 1492 y durante el siglo XVI).

El descubrimiento de América.El planteamiento de Colón (acortar la ruta hacia Asia por el Oeste) no fue original, ya que desde los griegos se había demostrado la esfericidad de la Tierra. Los planes de la expedición fueron presentados por primera vez al rey de Portugal, pero dada su falta de interés y de confianza en semejante empresa, Colón decidió buscar patrocinadores en los monarcas españoles, quienes se encontraban terminando la conquista de Granada. La presión ejercida por un grupo de cortesanos próximos a los reyes, así como el apoyo de los franciscanos de La Rábida, posibilitaron la financiación del proyecto. En virtud de las Capitulaciones de Santa Fe (17 de abril de 1492), Colón era nombrado almirante, virrey de las tierras descubiertas y obtenía el diez por ciento de las riquezas. Colón salió de Palos el 3 de agosto de 1492 y llegó al continente americano el 12 de octubre de 1492 (isla de San Salvador). El descubrimiento de América hizo posible que la Monarquía Hispánica adquiriera dimensiones universales.

Los hechos más significativos de la conquista fueron:

  • Conquista del Imperio Azteca. Hernán Cortés. Entre 1519-1521.
  • Conquista del Imperio Inca. Francisco de Pizarro y Diego de Almagro. Entre 1531-1533.
  • Las expediciones de Orellana (Amazonas), Valdivia (Chile), Hernando de Soto (Mississippi), etc. permitieron la exploración de gran parte de la América hispana.   

Los principales órganos peninsulares de gobierno de las Indias fueron:

  • Casa de Contratación de Sevilla (1503. Reyes Católicos). Organizaba y controlaba el comercio y la navegación con América: inspección de navíos, recaudación de impuestos, formación de pilotos, etc.
  • Consejo de Indias (1523, Carlos I). Tenía jurisdicción sobre todos los territorios y organismos americanos, incluida la Casa de Contratación de Sevilla. Sus principales funciones eran: el nombramiento de cargos, la elaboración de la legislación, etc.

   La estructura administrativa americana era la siguiente:

ü  Virreinatos: Nueva España (1535) y Perú (1544). Dirigidos por un virrey (representante del rey en estos territorios).

ü  Gobernaciones (provincias). Regidas por gobernadores subordinados a los virreyes. Las provincias fronterizas se denominaban capitanías generales.

ü  Corregimientos. Agrupación de una ciudad y el territorio circundante. Dirigidos por un corregidor.

ü  Audiencias. Tribunales superiores de justicia.

ü  Cabildos o ayuntamientos. Estructura similar a la de los municipios castellanos.

   Los sistemas de explotación económica fueron:

  • La encomienda. Asignación a un encomendero de un número determinado de indios para que trabajasen para él o le pagasen tributos. A cambio, debía protegerlos y evangelizarlos.
  • La mita. Sistema de trabajo forzado que se utilizaba para la explotación de las minas de oro y plata.

   La Corona recibía el denominado quinto real, es decir, el 20% de las riquezas americanas. Estos sistemas provocaron la reacción de Fray Bartolomé de las Casas (Brevísima relación de la destrucción de las Indias, 1552), que defendió los derechos de los indios y criticó duramente los abusos cometidos por los españoles. Su crítica motivó la publicación de las Leyes Nuevas de Indias (1542) que provocaron la llegada de población negra como mano de obra.

Las consecuencias de los descubrimientos fueron:

  1. Revolución de los precios (inflación). Fue una subida constante y continuada de los precios provocada por el aumento de la circulación monetaria (llegada de los metales preciosos americanos), la apertura de un nuevo mercado (América) y el crecimiento de la población. En definitiva, hubo un aumento de la demanda que no se correspondió con un incremento de la oferta, lo que motivó la subida de los precios.
  2. Desplazamiento de las rutas comerciales: el Atlántico desplazó al Mediterráneo como centro comercial más importante. Los puertos más importantes se situaron en el Atlántico: Cádiz, Sevilla y Lisboa.
  3. Intercambio de productos agrícolas y ganaderos.  Llegan a España los siguientes productos: patata, maíz, cacao, pimiento, tomate, tabaco, vainilla, judía verde, calabaza y pavo.
  4. América se convirtió en la principal zona para la emigra­ción de población española, produciéndose una mezcla racial (mestizaje): mestizos (blanco/indio), zambo (negro/india) y mulatos (blanco/negro).

3.3) Los Austrias del siglo XVI. Política interior y exterior.

Una de las características del siglo XVI fue la llegada al trono de la Monarquía Hispánica de una nueva dinastía, los Habsburgo o Austrias. Los reyes del siglo XVI son los llamados Austrias mayores: Carlos I y Felipe II. Un hecho de gran importancia fue la enorme herencia territorial que recibió Carlos I (hijo de Juana la Loca y Felipe el Hermos). La herencia materna consistió en los territorios de la Monarquía Hispánica. La herencia paterna se componía de los Países Bajos, Luxemburgo, Franco Condado, los Estados patrimoniales de la Casa de Austria y los derechos al trono del Sacro Imperio Romano Germánico.

La Monarquía Hispánica era supranacional. Cada reino (Castilla, Corona de Aragón y Portugal) conservaba sus instituciones, leyes, moneda, etc. El sistema de gobierno se caracterizaba por la intervención personal del monarca en los asuntos castellanos (Madrid, capital desde 1561), mientras que los virreyes representaban al rey en otros territorios. El sistema planteaba conflictos, apareciendo los consejos para auxiliar al monarca en las tareas de gobierno. Los consejos eran de dos clases:

  • Consejos especializados. Se ocupaban de materias concretas. El más importante fue el Consejo de Estado que se ocupaba de asuntos fundamentales como la política exterior, la guerra, la negociación de tratados internacionales, etc. Otros consejos especializados fueron el Consejo de Hacienda, el Consejo de la Inquisición, etc.
  • Consejos territoriales. Encargados de los asuntos de un determinado territorio. Consejo de Aragón, Consejo de Navarra, Consejo de Indias, Consejo de Italia, Consejo de Flandes y Consejo de Portugal.

   El sistema se completaba con la figura de los secretarios de los consejos, intermediarios entre el monarca y el consejo correspondiente. El secretario del Consejo de Estado era también el secretario personal del rey, es decir, tenía una gran influencia política. Gattinara, Francisco de los Cobos, Granvela o Antonio Pérez fueron secretarios personales de los monarcas del siglo XVI.

   Los conflictos internos que se desarrollaron durante el reinado de Carlos I fueron:


  • Movimiento Comunero (1520-1521). Fue un movimiento político de carácter ciudadano que se desarrolló en Castilla, en respuesta a la política desarrollada por Carlos I durante los primeros años de su reinado: nombramiento de consejeros extranjeros, designación de Adriano de Utrecht como regente de Castilla, petición de subsidios a las Cortes para financiar su elección como emperador alemán, etc. El movimiento fue dirigido por las clases urbanas (pequeña nobleza, burguesía y bajo clero), se inició en Toledo y se extendió a otras ciudades castellanas como Segovia, Salamanca, León, etc. Estas ciudades formaron la llamada Junta Santa. El movimiento derivó en una verdadera revuelta antinobiliaria, por lo que la nobleza apoyó a Carlos I. Los comuneros fueron derrotados en Villalar (Valladolid, 1521), y sus principales líderes ejecutados (Padilla, Bravo, Maldonado).

 

  • Germanías. Eran milicias gremiales creadas en Valencia y Mallorca para defenderse de los ataques de los piratas berberiscos. En Valencia, la peste y los ataques de los piratas berberiscos hicieron que la nobleza abandonara la ciudad en 1519. Las germanías se hicieron con el control y se inició una verdadera revuelta antiseñorial que continuó hasta el año 1523 (intervención del ejército real). En Mallorca la revuelta se desarrolló entre los años 1521 y 1523.

   Los conflictos internos del reinado de Felipe II fueron los siguientes:


  • Rebelión de los moriscos de las Alpujarras (1568-1570). Los moriscos eran antiguos musulmanes a los que la Pragmática de 1502 había obligado a convertirse al catolicismo. Sin embargo, este grupo  planteaba dos problemas. Por un lado, era una minoría de difícil integración social. Por otro, el gobierno estaba preocupado por la posibilidad de que apoyaran una invasión turca en Levante y Andalucía. La sublevación se produjo por la mala situación económica (subida de los precios de productos básicos). La derrota de los moriscos significó su deportación a Castilla y, en el siglo XVII (1609-1610), se decretó su expulsión.

 

  • Revuelta de Aragón (1591-1592). Se produjo por el asilo que los zaragozanos concedieron a Antonio Pérez, antiguo secretario de Felipe II, que había escapado de Madrid acusado de asesinato y vender secretos de Estado. Se refugió en Zaragoza, amparándose en las leyes tradicionales aragonesas. El conflicto finalizó con la ocupación de Zaragoza por el ejército real, y la ejecución del Justicia de Aragón (Juan de Lanuza). Desde ese momento, la Monarquía Hispánica obtuvo el poder de nombrar al Justicia de Aragón. Antonio Pérez logró huir y se refugió en Inglaterra.

   La llegada al trono de Carlos I modificó la política exterior de la Monarquía Hispánica, que dejó de ser mediterránea (centrada en Italia) y se convirtió en europea. Esta política no respondía a los intereses de la Monarquía Hispánica, sino a los intereses personales del rey. Los principales objetivos de Carlos I eran:

  • Detener el avance turco en el este de Europa y en el Mediterráneo.
  • Frenar el proceso de desintegración de la unidad cristiana europea (objetivo prioritario tras su elección como emperador del Sacro Imperio Romano Germánico en 1519)

   Esta política exterior condujo al enfrentamiento con Francia e Inglaterra (opuestos a la hegemonía de los Habsburgo en Europa) y con Venecia y el Papado (recelo ante la penetración hispana en Italia).

   La política exterior de Carlos I fue la siguiente:


  • Alianza con Portugal. Carlos I contrajo matrimonio con Isabel de Portugal (1526). Felipe II heredó el trono de Portugal en 1581.

 

  • Enfrentamiento con Francia, provocado por el control del Milanesado. El Milanesado era un punto clave para las comunicaciones entre los diversos territorios hispanos en Europa. La Paz de Cambrai (1529) puso fin al conflicto. La Monarquía Hispánica se hizo con el control del Milanesado.

 

  • Política mediterránea. Ocupación de Túnez para frenar el avance turco por el Mediterráneo occidental.

 

  • Política alemana. En un primer momento, Carlos I intentó la reconciliación entre católicos y luteranos (Dieta de Ausgburgo, 1530), pero fracasó. El conflicto continuó hasta la firma de la Paz de Ausgsburgo (1555), que establecía la libertad de los príncipes alemanes para elegir la religión e imponerla a sus súbditos. Esta paz provocó la abdicación de Carlos I en 1556.

    La política exterior de Felipe II fue la siguiente:

 

  • Política mediterránea. Túnez y Chipre, entre los años 1560 y 1570, pasaron a poder turco. La respuesta de Felipe II fue la formación de la Santa Liga, integrada por la Monarquía Hispánica, el Papado y Venecia. Esta alianza derrotó a los turcos en la Batalla naval de Lepanto (7 de octubre de 1571), que puso fin al avance turco por el Mediterráneo occidental.

 

  • Inglaterra. Felipe II fue rey consorte de Inglaterra por su matrimonio con María Tudor. La subida al trono de Isabel I convirtió a Inglaterra en una de las principales rivales de la Monarquía Hispánica. Isabel I apoyó a los rebeldes flamencos, mientras que Felipe II hizo lo mismo con los rebeldes católicos ingleses. Felipe II decidió invadir Inglaterra mediante la denominada Armada Invencible en el año 1588 (150 barcos y 30000 hombres). Las condiciones meteorológicas adversas impidieron que se cumpliera ese objetivo.

 

  • Intervención en los asuntos internos de Francia. Felipe II, aprovechando la crisis interna francesa debida al enfrentamiento por la sucesión de la corona, reclamó el trono de Francia para su hija Clara Isabel Eugenia (Felipe II había contraído matrimonio con Isabel de Francia). Los conflictos continuaron hasta la firma de la Paz de Vervins (1598), por la que la Monarquía Hispánica renunciaba a Borgoña y Francia renunciaba a la Navarra española.

 

  • Países Bajos. Fue el principal problema de la política exterior del siglo XVI. Era una zona de gran desarrollo económico basado en la existencia de una importante industria textil. Los Países Bajos presentaban dos problemas. Por un lado, la oposición de la burguesía flamenca a la política desarrollada por Felipe II. Por otro lado, una parte de la población era protestante. El saqueo de algunas iglesias católicas (1566) provocó la reacción de Felipe II, nombrando gobernador al duque de Alba (Fernando Álvarez de Toledo). Su acción de gobierno se caracterizó por la durísima represión que se manifestó en la creación del Tribunal de los Tumultos (conocido popularmente como Tribunal de la Sangre por el gran número de condenas a muerte que dictó). Esta política extendió la revuelta, y se convirtió en un enfrentamiento abierto. Los flamencos fueron dirigidos por Guillermo de Orange, y contaron con el apoyo de Inglaterra, de los protestantes alemanes y de los hugonotes franceses. Finalmente, las provincias católicas del sur constituyeron la Unión de Arrás (1579), y las provincias protestantes del norte la Unión de Utrecht (1579). El conflicto continuó durante el siglo XVII.   

 

3.4) Los Austrias del siglo XVII. Política interior y exterior.

Los reyes del siglo XVII son los llamados Austrias menores.

  • Felipe III (1598-1621). Su reinado se caracteriza por el cambio de la política exterior, tratando de poner fin a los conflictos en los que la Monarquía Hispánica participaba. La razón fue el inicio de la crisis económica del siglo XVII.
  • Felipe IV (1621-1665). Tuvo que hacer frente a una guerra europea generalizada (Guerra de los Treinta Años), a problemas internos (revueltas de Portugal y Cataluña), y a la gravísima situación económica.
  • Carlos II (1665-1700). La derrota militar hispana, los desastres naturales, etc. son los rasgos propios de su reinado. A finales del siglo, se observan signos de recuperación en las zonas costeras como Cataluña, País Vasco y Valencia.

Las principales características de la política interior fueron las siguientes:

ü  Los reyes del siglo XVII delegaron el poder en personas de su confianza (validos).  Destacan el duque de Lerma (valido de Felipe III) y el conde duque de Olivares (Felipe IV).

ü  Ante la decadencia y la corrupción de los consejos, surgieron las juntas. Las juntas (Junta de Población, Junta de Reforma, etc.) se ocupaban de asuntos concretos de gobierno. El creador del sistema fue Lerma, pero el gran impulsor fue Olivares.

ü  Expulsión de los moriscos (1609-1610), que culminó el proceso de unificación religiosa iniciado por los Reyes Católicos.

ü  Olivares diseñó un proyecto llamado Unión de Armas (1625), que consistía en  repartir entre todos los Estados el peso de la política real, formando un ejército común  que sería financiado por cada Estado en función de su población y riqueza. Valencia y Aragón aceptaron mantener un ejército durante quince años, pero Cataluña se negó. El intento centralizador de Olivares provocó numerosas revueltas: Vizcaya, Nápoles, Andalucía, Aragón, etc. La rebelión de Cataluña y la de Portugal fueron las más importantes:

·       La rebelión catalana se inició en 1640 y estuvo protagonizada por el campesinado y la población urbana, y dirigida por la burguesía catalana. El objetivo era establecer una República bajo la protección del rey Luis XIII de Francia. La rebelión concluyó en 1652, tras la ocupación de Barcelona por el ejército real.

·       La rebelión portuguesa se inició aprovechando la revuelta catalana. Los portugueses, apoyados por Francia e Inglaterra, nombraron monarca a Juan IV. El conflicto finalizó con la firma del Tratado de Lisboa (1668), por el que la Monarquía Hispánica reconocía la independencia de Portugal.

   Política exterior. A finales del siglo XVII, se inició un período de paz que se manifestó en la firma de la Paz de Vervins (1598) con Francia, el fin del enfrentamiento con Inglaterra (1604), y la firma de la Tregua de los Doce Años con las Provincias Unidas (1609-1621). Las dificultades económicas de la Corona explican la necesidad de establecer estos acuerdos. Sin embargo, a partir del año 1620, la Monarquía Hispánica intervino en la Guerra de los Treinta Años (1618-1648) para ayudar a la rama austriaca de los Habsburgo. La guerra, iniciada en el Sacro Imperio Romano Germánico, se produjo por razones religiosas y fue un conflicto generalizado entre naciones católicas y protestantes, que derivó en un enfrentamiento por la hegemonía en Europa. Francia, país católico, apoyó a las naciones protestantes. La guerra concluyó con la Paz de Westfalia (1648). Westfalia puso fin a la hegemonía hispana en Europa, hegemonía que pasó a Francia. Además, la Monarquía Hispánica tuvo que reconocer la independencia de las Provincias Unidas (Holanda).

La guerra hispano-francesa continuó hasta la firma de la Paz de los Pirineos (1659), que estableció la actual frontera con Francia. La Monarquía Hispánica tuvo que devolver el Rosellón y la Cerdaña.

Durante el reinado de Carlos II, la Monarquía Hispánica tuvo que hacer frente a la política expansionista francesa. El temor a la hegemonía francesa hizo que Inglaterra y Holanda apoyaran a la Monarquía Hispánica.

  

3.5) Sociedad, economía y cultura de los siglos XVI y XVII.

   Durante el siglo XVI, se produjeron dos importantes fenómenos económicos:

ü  Revolución de los precios (inflación). Fue una subida constante y continuada de los precios provocada por el aumento de la circulación monetaria 28 (llegada de los metales preciosos americanos), la apertura de un nuevo mercado (América) y el crecimiento de la población. En definitiva, hubo un aumento de la demanda que no se correspondió con un incremento de la oferta, lo que motivó la subida de los precios.

ü  Endeudamiento de la Corona. Se debió a la financiación de la política exterior de los Austrias (intervención en numerosas guerras). La financiación se obtenía de los préstamos de banqueros privados y de la venta de juros (títulos de deuda pública). Estos recursos no fueron suficientes y Felipe II declaró tres bancarrotas en 1557, 1575 y 1596.

La sociedad era estamental, dominando los estamentos privilegiados: nobleza y clero (aumentó en el siglo XVI). Una práctica habitual fue la compra de títulos nobiliarios  y el acceso a la nobleza por servicios a la monarquía (nobleza de toga y espada). Los no privilegiados, ya fueran campesinos o población urbana, debían pagar impuestos (se les denominaba pecheros). Además, había grupos como los moriscos o los judíos conversos. Estos grupos eran marginados o perseguidos, por esta razón, intentaban ocultar su origen. La limpieza de sangre les impedía el acceso a cargos públicos y les aislaba socialmente.

Durante el reinado de Carlos I penetraron en España corrientes culturales como el humanismo erasmista. Los humanistas más destacados son Juan Luis Vives y los hermanos Valdés. Se desarrollan las teorías jurídicas de Francisco de Vitoria y Francisco Suárez, creadores del Derecho Internacional. En el campo científico destacan la fundación de la Academia de Matemáticas (1582) y la obra del médico Miguel Servet (descubridor de la circulación pulmonar). En la literatura, se desarrolla la poesía lírica de influencia italiana (Garcilaso de la Vega, Juan Boscán); de la poesía mística (Teresa de Jesús y Juan de la Cruz); de la poesía ascética (Fray Luis de León). En el teatro se produce la transición entre las formas medievales y el teatro moderno (Juan del Encina, Lope de Rueda). En el campo de la novela, destaca una obra maestra de la novela castellana, El lazarillo de Tormes.

   El siglo XVII se caracteriza por la crisis socioeconómica provocada por las siguientes causas:

·       Disminución de la población (pasó de 8 millones a 7 millones). Las razones fueron las epidemias (peste), las guerras constantes (Flandes, Portugal, etc.), la emigración a las Indias, la expulsión de los moriscos, etc.

·       Política monetaria. Consistió en la alteración de la moneda para aumentar los ingresos de la Corona. Esta política afectó a la moneda de vellón (moneda de cobre y plata): emisión de moneda de vellón solo de cobre, reducción del peso de la moneda, emisión de grandes cantidades de moneda, etc. Perjudicó a las clases populares porque subieron los precios de los productos expresados en moneda de vellón.

·       Mentalidad social de la época. El ideal social era vivir de las rentas, es decir, vivir sin trabajar. Por ello, se buscaban puestos en la Administración o títulos que proporcionaran ingresos, despreciándose las actividades productivas.

 Las consecuencias fueron:

  • Disminución del nivel de vida de los campesinos. Las razones fueron el descenso de los precios agrícolas, las malas cosechas y el aumento de los impuestos. Muchos perdieron sus tierras, lo que provocó una concentración de la propiedad en manos de la nobleza.
  • Paralización de las actividades artesanales y el debilitamiento del comercio. Por la llegada de productos extranjeros manufacturados más baratos que los nacionales (ruina de las industrias artesanales peninsulares, el retroceso del comercio con América como consecuencia de la falta de barcos mercantes  y la idea de que el trabajo manual era un deshonor, idea típica de la nobleza que fue asumida por la burguesía.
  • Ruina de las finanzas estatales.  Las medidas para buscar recursos extraordinarios (juros, venta de cargos, etc.) no fueron suficientes para hacer frente a los gastos de la Corona. Los ingresos se destinaban a financiar la costosa política exterior. Los ingresos procedían de las rentas de Castilla, los metales preciosos y el sistema tributario, prácticamente agotadas en el siglo XVII.

En el siglo XVI, penetraron en España corrientes culturales como el humanismo erasmista. Los humanistas más destacados son Juan Luis Vives y los hermanos Valdés. Se desarrollan las teorías jurídicas de Francisco de Vitoria y Francisco Suárez, creadores del Derecho Internacional. En el campo científico destacan la fundación de la Academia de Matemáticas (1582) y la obra del médico Miguel Servet (descubridor de la circulación pulmonar). En la literatura, se desarrolla la poesía lírica de influencia italiana (Garcilaso de la Vega); de la poesía mística (Teresa de Jesús y Juan de la Cruz); de la poesía ascética (Fray Luis de León). En el teatro destacan Juan del Encina y Lope de Rueda. En el campo de la novela, destaca una obra maestra como el El lazarillo de Tormes.

El siglo XVII es una etapa muy brillante desde el punto de vista cultural. Por ello, se denomina “Siglo de Oro”. En la producción literaria, destaca el teatro (surge la denominada comedia nacional) con autores como Lope de Vega, Calderón de la Barca, Tirso de Molina; la poesía con Góngora (culteranismo) y Quevedo (conceptismo, y la novela picaresca con autores como Mateo Alemán o Quevedo. Figura muy destacada es Miguel de Cervantes, autor de El Quijote.

En el campo del arte se desarrolla el Barroco. Es uno de los períodos más brillantes de la pintura española. Sus principales representantes son Ribera, Ribalta, Zurbarán o Murillo El más importante de todos los pintores barrocos y uno de los grandes genios de la pintura universal es Velázquez. Las Meninas es su gran obra al aglutinar las características de su estilo: perspectiva aérea, composición, técnica depurada, etc.

 

3.6) La Guerra de Sucesión. La Paz de Utrecht. Los pactos de familia.

Carlos II, el último de los Austrias españoles, murió sin descendencia (1700). Su último testamento en favor de Felipe de Borbón (futuro Felipe V), nieto del rey francés Luis XIV, ponía en peligro el equilibrio europeo establecido en la Paz de Westfalia porque se temía una posible alianza entre Francia y España que convertiría a Francia en la gran potencia europea. En Europa se formaron dos bandos: la Alianza de La Haya (Austria, Inglaterra, Holanda, etc.), partidarios del mantenimiento del equilibrio europeo y de las aspiraciones al trono español del Archiduque Carlos de Austria. Y por otro lado, Francia y España. Felipe V fue aceptado como sucesor de Carlos II en Castilla en el año 1701. Sin embargo, Cataluña y Valencia apoyaron al Archiduque Carlos. En 1713 se pone fin a la guerra con la firma del Tratado de Utrecht:

ü  Reconocimiento de Felipe V como rey de España y de las Indias y renuncia a los derechos al trono de Francia.

ü  España cede sus posesiones de los Países Bajos y de Italia a Austria.

ü  Inglaterra conservó Menorca y Gibraltar obtenidas durante la guerra.

En 1733 se firmó el Primer Pacto de Familia, inicio de la tradicional alianza franco-española del siglo XVIII. El apoyo francés permitió que el príncipe Carlos  (futuro Carlos III) obtuviera la Corona del Reino de las Dos Sicilias en 1738.

   En 1743 se firmó el Segundo Pacto de Familia, por el cual España se comprometía a luchar contra Gran Bretaña y Francia ayudaría para recuperar Menorca y Gibraltar.

   Carlos III (1759-1788) firmó el Tercer Pacto de Familia (1761). España ayudó a Francia en la Guerra de los Siete Años (1756-1763), perdiendo la Florida, pérdida compensada por la cesión francesa de la Luisiana. España y Francia intervinieron en la Guerra de la Independencia de los Estados Unidos (1776-1783), apoyando a los independentistas americanos. España pudo recuperar la Florida y Menorca.

 

3.7) La nueva Monarquía borbónica. Los decretos de Nueva Planta. Modelo de Estado y alcance de las reformas.

   El triunfo borbónico en la Guerra de Sucesión supuso una transformación del Estado: aparición de una monarquía absolutista y centralizadora. La monarquía es considerada una institución sagrada: el poder del monarca es absoluto (concentra en su persona el poder legislativo, judicial y ejecutivo) y el rey sólo es responsable de sus actos ante Dios. Los Borbones realizaron una serie de reformas:

·       Consejo de Castilla como órgano supremo de la administración del Estado.

·       Aparición de los Secretarios de Estado y de Despacho, son nombrados por el rey y se ocupan de una faceta de gobierno determinada (economía, guerra, marina, etc.).

·       Modificación del sistema sucesorio. Se aprueba la Ley Sálica (1713) que otorga prioridad a los varones sobre las mujeres en el orden sucesorio al trono.

·       Decretos de Nueva Planta (Valencia 1707, Aragón 1711, Mallorca 1715, Cataluña 1716). Suponen la desaparición de las instituciones tradicionales  (Cortes, Diputación General, etc.) de los Estados de la Corona de Aragón, imponiéndose la organización administrativa de Castilla. Sólo Navarra y el País Vasco conservaron sus instituciones.

·       A nivel territorial, surgen los Intendentes provinciales, encargados de las finanzas reales, administración del ejército, policía, justicia y vigilancia de las autoridades locales. Se convirtieron en uno de los pilares del centralismo borbónico.

·       Los Borbones limitaron el poder de la Iglesia, interviniendo en los asuntos eclesiásticos (regalismo). Un ejemplo fuel la expulsión de los jesuitas (1767).


3.8) Las reformas borbónicas en los virreinatos americanos.

Las reformas políticas más importantes fueron:

1)   La creación de una Secretaría de Estado y de Despacho encargada de los asuntos americanos.

2)   El aumento del número de virreinatos. A los dos existentes (Nueva España y Perú), se sumaron el de Nueva Granada (Panamá, Colombia, Ecuador y Venezuela) en 1717 y el de Río de la Plata (Argentina, Bolivia, parte de Chile, Paraguay y Uruguay) en 1776.

3)   La formación de un ejército regular americano con destacamentos en lugares estratégicos,

4)   La creación de las intendencias según el modelo establecido en la España peninsular.

   En cuanto a las relaciones económicas con América, la Monarquía impulsó la creación de las Compañías Privilegiadas cuya misión era controlar las importaciones y exportaciones con América: Real Compañía de Comercio de Barcelona, etc. En 1778 se aprobó el Decreto de Libre Comercio, que estableció que los principales puertos españoles podían comerciar libremente con las colonias. El comercio exterior español se desarrollaba casi exclusivamente con América y los beneficios obtenidos servían para saldar el déficit de las relaciones comerciales establecidas con Europa. Además, se produjo un aumento de la presión fiscal lo que provocó un fuerte malestar social que se manifestó en diversas revueltas protagonizados por los criollos (descendientes de españoles) e indígenas.

 

3.9) Sociedad, economía y cultura del siglo XVIII.

La sociedad era estamental, es decir, dividida en estamentos con ordenamientos jurídicos diferenciados. Los estamentos privilegiados eran la nobleza y el clero. El estado llano carecía de privilegios.

   La nobleza constituía un grupo social cerrado. Eran grandes propietarios y solían residir en la Corte. En general, recibían rentas de sus tierras, pero no invertían en su modernización. El número de nobles aumentó a lo largo del siglo XVIII.

   El clero  disminuyó a lo largo del siglo XVIII. Constituía el 3% de la población Española y la Iglesia poseía el 15% de las tierra. El poder de la Iglesia fue recortado a lo largo del siglo XVIII.

 El estado llano. Formaba el 90% de la población. Estaba compuesto por distintos grupos sociales con claras diferencias económicas. La burguesía se dedicaba a actividades industriales y comerciales. Fue un grupo social muy pequeño durante el siglo XVIII y su ideal era el ennoblecimiento. El campesinado era el grupo mayoritario de la sociedad española. Existían otros grupos como las clases populares urbanas (asalariados, etc.) y los marginados.

Agricultura.  Era una agricultura de secano, aunque se introdujeron nuevos cultivos como el maíz y la patata. Se registró un aumento de la producción agrícola por el incremento de la superficie cultivada.  La Corona realizó reformas como la liberalización del comercio de granos y la creación de pósitos (silos). También fomentó la agricultura de regadío mediante la construcción de canales como el Canal de Castilla o el Canal Imperial de Aragón. Por último, por iniciativa real se colonizaron terrenos baldíos como Sierra Morena.

 Industria. La Corona intentó impulsar su desarrollo mediante la creación de las manufacturas reales, pero los resultados fueron mediocres por la falta de organización, la escasa rentabilidad, etc. Destaca la industria textil catalana, impulsada por el aumento de la demanda interna, la apertura del mercado americano a los productos textiles catalanes (Decreto de Libre Comercio de 1778) y la introducción de moderna maquinaria de vapor. 

   Comercio con América. La Monarquía impulsó la creación de las Compañías Privilegiadas para controlar las importaciones y exportaciones con América como la Real Compañía de Comercio de Barcelona. En 1778 se aprobó el Decreto de Libre Comercio por el que los principales puertos españoles podían comerciar libremente con las colonias.

La Ilustración es un movimiento intelectual cuyos principios son la confianza en la razón, la creencia en el progreso, la búsqueda de la felicidad del hombre y la lucha contra la superstición y el oscurantismo. La Ilustración fue un movimiento minoritario, destacando Feijoo, Campomanes, Jovellanos, Cabarrús, Floridablanca, Cadalso, etc. Los ilustrados potenciaron la creación de la Academias (Lengua 1714, Historia 1738) y las Sociedades Económicas de Amigos del País, sociedades de carácter privado cuyos objetivos principales eran la realización de reformas, el desarrollo económico del país, el fomento de la ciencia, etc.

   En la segunda mitad del siglo XVIII, aparece el despotismo ilustrado, que combina las ideas de la Ilustración con el absolutismo monárquico. El despotismo ilustrado pretende la realización de una serie de reformas (educación, economía, etc.) para lograr una modernización de la sociedad con el objetivo de asegurar la felicidad y el bienestar de la población, evitando que esas reformas se realicen a través de una revolución. Esta idea se expresa en la famosa frase “todo para el pueblo pero sin el pueblo”. Carlos III es el mejor representante español del despotismo ilustrado.

No hay comentarios:

Entradas populares

¿Qué opinión te merece el contenido de este blog?